Graytaste es la piel que recubre a David Freije Fernández, diseñador gráfico, ilustrador y creativo, construyendo así un ente capaz de darle cara a ideas, empresas, servicios o agrupaciones, y fortaleciendo su imagen pública con métodos actuales.
Como entidad, Gray Taste es sólo una firma más. Pero como servicio se convierte en un ser vivo, dotado de conciencia y cualidades, cuya misión es una práctica y sensible amalgama de funciones. La utilidad de esas funciones no es otra que la de extraer la esencia de una idea, organismo, persona o sociedad, y convertirla en una imagen vívida que ayude a el ojo ajeno a identificar dicha imagen con la idea principal.
Para Gray Taste no sólo existe el objetivo de vestir una idea, si no que en el caso de que sea necesario puede trabajar como cerebro, y crear ideas asociadas a las necesidades que reivindique el cliente.
Lo más importante para Gray Taste es establecer un lazo de conexión con la idea principal, seguir las especificaciones del cliente, y construir la imagen solicitada. Para ello se da prioridad al valor comunicativo que pueda tener el vestido corporativo, dejando que los adornos, los recursos estéticos, la sofisticación giren en torno a la utilidad del diseño construido.
Dentro de las funciones de Gray Taste coexiste con otras la de ilustrador. Y al igual que en el resto de las tareas que es capaz de llevar a cabo, la construcción de las ilustraciones se adapta a lo exigido por el cliente, y se crea a imagen y semejanza de la idea principal que se toma como punto de referencia. Las ilustraciones pueden ser de la complejidad que el cliente exija, o de la sencillez necesaria para aplicarse a campos muy diversos. Cómic, infografía, decoración, diseños varios, imagen corporativa,... son múltiples las aplicaciones de la ilustración y Gray Taste está dispuesto y cualificado para realizarlas cuando sea necesario.